¿Cómo se pueden enfrentar las aseguradoras españolas a la ausencia de Baremo de Daños Personales en Latam?

El bufete especializado en seguros, DAC Beachcroft, organizó en Madrid una jornada para analizar los diferentes aspectos jurídicos que deben tener en cuenta las aseguradoras españolas cuando desembarcan en Latam.

Quizás la principal conclusión fuera que las compañías españolas deben olvidarse de la “zona de confort” jurídica que les proporciona aquí el Baremo, ya que, ante su ausencia, los tribunales de cada país tienen una fuerte subjetivación a la hora de fijar cantidades en sus fallos, lo que dificulta mucho el cálculo de las provisiones para siniestros de las aseguradoras.

Por ejemplo, DAC Beachcroft explica cómo valora un tribunal los daños personales en los siguientes países:

Brasil. La regla general es que la indemnización sea evaluada de acuerdo con la magnitud de los daños, que abarcan tanto los daños materiales como las lesiones corporales y, dependiendo del caso, los daños morales.
Chile. No hay una regla general; depende de cada caso concreto. Los factores considerados son: la extensión de las lesiones, la edad, los ingresos del asegurado, el tamaño de la parte responsable y el lugar del procedimiento.
Colombia. Los Tribunales tienen como objetivo compensar por completo a la víctima. Los factores considerados incluyen: Gastos reales incurridos, costes de cuidado o dependencia futuros, pérdida de ingresos, dolor y sufrimiento y pérdida de disfrute. No hay daños punitivos.
México. El método depende del lugar o estado donde la víctima se encuentre. Los factores principales son el tipo de daño y el salario de la víctima, así como la situación económica del asegurado.

Casos concretos

El bufete presentó varios casos concretos. Por ejemplo, la indemnización por amputación de pierna en estos países:

Brasil. La indemnización se ajustará a la proporción en que la persona es incapaz de trabajar más los daños morales.
Chile. Aproximadamente unos 100.000 dólares
Colombia. Aproximadamente unos 538.000 dólares más los posibles daños emergentes.
México. Aproximadamente 15.000 dólares

Otro ejemplo concreto: La indemnización por incapacidad total tras un siniestro:

Brasil. Se extiende a todas las pérdidas materiales de la víctima (incluyendo la pérdida de ingresos) y los daños morales.
Chile. Aproximadamente 600.000 dólares
Colombia. Aproximadamente 680.000 dólares más los posibles daños emergentes
México. Aproximadamente 620.000 dólares.

Como se puede ver en los casos anteriores, la conclusión más importante es que existe una enorme variabilidad de las indemnizaciones según los diferentes países, e incluso dentro de los propios países, según la región donde ocurra el siniestro.